sábado, 17 de diciembre de 2016

La danza renacentista


La danza es una parte muy importante de la música renacentista porque estaba presente en todas las celebraciones realizadas por las clases altas e influenció a la música instrumenta, ya que gran parte del repertorio estaba dedicado a la danza.

Todo noble con una buena educación debía saber bailar. Los bailes se realizaban en grandes salones que tenían gran importancia dentro de los palacios. Además, es en esta época cuando se encuentran los primeros manuscritos e instrucciones a cerca de cómo se debía bailar.

Al igual que en todos los aspectos de la cultura, la imprenta también influyó en la danza. En esta época se crean los primero escritos coreográficos. Sabemos de la existencia de muy variados tipos de danzas, entre los que destacan los siguientes:
La pavana fue sin duda la danza más importante de la época y abría siempre el baile. En ella sólo participaban los organizadores del eveno y es pausada y refinada.



La gallarda se caracteriza por su paso saltado y alegre. Suele ser de ritmo ternario e interpretada después de la pavana.

El branle era una danza que se bailaba en círculo Los participantes se agarraban e iban girando de derecha a izquiera.

 

El saltarello era una danza viva y alegre de procedencia italiana que se interpretaba en un ritmo ternario y se llamó así por su peculiar paso saltado

Algunos de los coreógrafos más importantes de la época fueron Domenico da Piacenza, Guglielmo Ebreo da Pesar y Thoinot Arbeau, que además aportaron mucha información sobre la música, no sólo de la danza.














viernes, 9 de diciembre de 2016

La viola da gamba

La viola da gamba pertenece a la familia de los cordófonos de arco. Tuvo su mayor momento de esplendor durante el barroco, al mismo tiempo que una nueva familia de instrumentos, la de los violines, irrumpe en el mundo de la música con mucha fuerza, aunque ya se usaba esde el siglo XV, época que estamos estudiando.

 Ya en la Edad Media existen representaciones de instrumentos de cuerda, como vihuelas de arco y rabeles, y no es hasta el siglo XV cuando aparecen instrumentos con características similares a la viola  de gamba, y que dejó de usarse a finales del XVIII, cuando la aparecen las grandes orquestas y el violoncello, más poderoso en sonido que la viola de gamba. Jordi Savall comenzó a estudiar este instrumento para recuperar los sonidos de este instrumento analizando partituras y documentos históricos.

Numerosos testimonios  sustentan la hipótesis de que este instrumento fue creado en la Corona de Aragón (Reino de Valencia, Baleares, Cerdeña, sur de Italia) como evolución de la vihuela de mano. Se desarrollan modelos de diversos tamaños y el instrumento se expande rápidamente por toda España, Italia, Alemania, Francia e Inglaterra.

Resultado de imagen de viola da gamba
Madame Henriette tocando la viola da gamba, cuadro de Jean-Marc Nattier, 1754.
Entre sus características destaca que estamos ante un instrumento con diapasón curvo y con siete trastes; una caja con hombros caídos y fondo plano, con talud hacia el mango; una tabla armónica tallada; oídos en forma de C, el puente curvo y un clavijero tallado con motivos figurativos. Las  cuerdas estaban echas de tripa y estaban afinadas por cuartas con una tercera mayor intercalada.

 El instrumento se solía sujetar entre las piernas, con la excepción de las violas de gran tamaño, que se apoyaban en el suelo y se sostenías verticalmente. El arco se coge con palma arriba teniendo algún dedo en contacto directo con las cerdas.

En cuanto a su historia reciente, destaca que en la segunda mitad del siglo XX el instrumento recuperó su importancia debido al movimiento de recuperación de la música antigua interpretada, con especial  protagonismo de centros de enseñanza como la Schola Cantorum Basiliensis (Suiza) o los conservatorios holandeses.